a tu mamá también
Hoy escribiste, solo para recordarme que la estás pasando mal, solo para notificarme que también es difícil para ti. Quieres dejar claro que la vida se quedó varada en algún lugar de una ciudad imposible. Yo también llegué a otro destino pero por una ruta distinta. Aquella que decidimos no compartir por ir en búsqueda de eso que, diferenciadamente, necesitábamos.

Al igual que tú, en este punto, también he asegurado que tomamos la mejor decisión.

En cinco meses, Floyd es una bola de pelos rodante y sonora,
duerme horas, se levanta, se lanza a la joda y vuelve a dormir.

Me ha enseñado tanto. Parece que está decidido a nunca
ser un perro adulto, en ir de un lado para otro, desenfrenadamente,
bien dicen que los perros se parecen a sus dueños.


Volver a las "aulas" por estos tiempos significa avateres
de diferentes personalizaciones. 

Definitivamente muchas cosas
no volverán a ser como antes.


Volver a leer, así fuese en digital, fue terapéutico.

El primer día del año caminé más de una hora
en una carretera, Violeta dejó de instir con las llamadas.

Ya estaba en casa. Poco iba a durar
la salvación de mi dignidad.

Extraño leerte. A veces.
Escribo cada vez menos,
pienso de más, cada vez más.


09:07 a.m.

Es cierta esa frase de que a veces el enemigo está solo en tu cabeza. Conduzco hacia el sur de Lima y pienso en esa frase, se repite en mi cabeza mientras piso el acelerador con un apuro innecesario. A veces, cuando sufres de ansiedad buscas salidas con drogas legales e ilegales, terapias, etc., y ella odia que tome algunos caminos que se me cruzan, sin embargo, aquí estoy, sin ninguna otra necesidad más que la de estar en movimiento. Constante.

6:15 p.m.

A pesar de tantos años, aún me cuesta dormir...

08:02 a.m.

Sigues escribiendo igual, brutalmente dulce; yo sigo haciéndolo para no sentirme solo pero igual sigo llorando por las noches. Intenté con whisky barato y marihuana. Intenté con toda la cartelera de Netflix y libros que nunca terminé. Intenté con un taller de improvisación y un curso de creatividad. Aún no puedo, aún no quiero.