Luana va 6 meses dando vueltas en su cama sin poder dormir bien:
un día te dije que iba a hacerme un tatuaje en forma de pistola porque me recodaría un poco a mi padre y a mi madre. irónicamente ahora también me recuerda a ti. me dio mucha risa tu cara de extrañeza, como diciendo: “estás loca luana”. al final me lo he terminado haciendo y algunas veces tengo una avalancha de recuerdos cuando estoy desnuda y miro mi cadera. 
recuerdo a papá con su traje de policía. con el cabello bien peinado y sus zapatos impecables. siempre fue un tipo que le gustaba andar elegante a pesar de tener un uniforme rutinario. “¡luana, eso tiene su lugar!” un maniático del orden, al igual que mi madre. pareciera que sus vidas estuvieran unidas por ese afán loco por tener todo ordenado. “verduras abajo, frutas en el medio, comida para calentar arriba” siempre fue una tarea tediosa memorizarme el orden de todas las cosas de los espacios compartidos en casa. al final he terminado igual de maniática que ellos. seguro te diste cuenta. zapatos, blusas, pantalones y otras prendas ordenadas por colores. es irónico, porque en el departamento siempre está todo ordenado, pero la vida de la chica que lo habita es un desorden total. patas arribas. notas mentales por doquier. es como si en un laberinto estuvieran marcadas sistemáticamente todas las salidas, sin embargo se opta por seguir chocando contras los muros. 
luego de que mis padres fallecieran en aquel accidente de auto hallé una pistola hermosa en su habitación. una réplica muy buena de una harper's ferry. estaban impresas las iniciales de mi madre. lucía ugarte larrea. descubrí una nota en la caja en donde estaba: 
“para lucía, con mucho amor y balas.
gracias por matarme un poquito y resucitarme con tu cariño.”
no sé en qué nivel de romanticismo puedo categorizar un regalo así pero me agradó la pistola y la guardé como un recuerdo del amor que los unió. hace poco cumplieron catorce años de fallecidos y buscando una fotografía de los tres juntos hallé la pistola. nunca la había sacado de su estuche. esta vez la saque y del cañón de la pistola cayó una foto enrollada. era una fotografía de ellos. en argentina. atrás aparecía el obelisco de buenos aires. sonreían a más no poder. radiantes en un día soleado. marzo del 92. yo nací el 93. supongo que fui producto de una de sus tantas lunas de miel que tuvieron. pues si, soy víctima de un amor inquieto y aventurero. de un beso a la salida del colegio y unas rosas a los quince años. de una vuelta por la plaza de armas y una cena en el malecón. de una bicicleteada por la costa verde y unas películas en el excelsior. de una pasión rebelde y de corazones embriagados por tanta fiesta.
me he hecho un tatuaje. una pistola con un diseño espléndido y un significado hondo. que me recuerda también un poco a ti. porque tenías una pistola tatuada en la espalda. una magnum bien delineada y abajo tus iniciales. por eso ahora guardo dos pistolas. una que me recuerda el amor de mis padres y otra que me recuerda tu partida. una vacía y la otra con balas. ausente solamente una. la misma que decidiste dedicártela con alcohol y boleros junto a tus depresiones y pastillas en aquella historia que aún me cuesta narrar. una bala que sigue cruzando, aún, día a día, lentamente, mi pecho.


Dante, ebrio, para variar:
vamos a salir a la ciudad y entonar algunas canciones, kiara. pero tu no cantas mucho así que cantaré bajito y solo, mientras te ríes de mis gallos y mi desentonación, no importa, quiero cantar porque me relaja. pero tú siempre te ríes así que una risa más o una risa menos, da igual. 
siempre voy a recordar que me dijiste que conociste un pavo que escribe, que tiene un blog en donde publica huevadas que le pasa, porque siempre le pasa huevadas, ¿no? 
- ¿en serio le dices a la gente que tienes un blog?, ya nadie lee los blogs dante, haz otra cosa, manualidades por ejemplo.
- quizá mis textos cuenten como manualidad.
- ¿manualidad en base a reciclaje? 
siempre con el látigo en la mano. apuntando bien. sujentando bien. mirando mi espalda. ¡plash! eres tan malvada como tu cama. voy a quemar tu cama. voy a destruirla. voy a desarmarla y hacer una fogata para calentarme las manos y los pies que siempre los tengo helados. voy a hacer dibujos en tus sábanas que cuidas con dedicación y las destenderé, porque odias ver tu cama destendida, como si no te agradara destenderla estando sola y desnuda.