Soy un experto en decepcionarte,
en hacerte pedazos,
en quemarte la cabeza cuando
solo quiero terminar una canción,
pero ya ves que no resulta,
que soy dos pies izquierdos
y por eso termino tropezando siempre.

Además lo que diga la gente me importa poco,
pero tú ya estás cansada de los torpes de tu vida
por eso termino sobrando.

Ahora, por ejemplo,
se quemó el almuerzo.

Nada sabe bien.