Extraño leerte. A veces.
Escribo cada vez menos,
pienso de más, cada vez más.
09:07 a.m.
Es cierta esa frase de que a veces el enemigo está solo en tu cabeza. Conduzco hacia el sur de Lima y pienso en esa frase, se repite en mi cabeza mientras piso el acelerador con un apuro innecesario. A veces, cuando sufres de ansiedad buscas salidas con drogas legales e ilegales, terapias, etc., y ella odia que tome algunos caminos que se me cruzan, sin embargo, aquí estoy, sin ninguna otra necesidad más que la de estar en movimiento. Constante.
Es cierta esa frase de que a veces el enemigo está solo en tu cabeza. Conduzco hacia el sur de Lima y pienso en esa frase, se repite en mi cabeza mientras piso el acelerador con un apuro innecesario. A veces, cuando sufres de ansiedad buscas salidas con drogas legales e ilegales, terapias, etc., y ella odia que tome algunos caminos que se me cruzan, sin embargo, aquí estoy, sin ninguna otra necesidad más que la de estar en movimiento. Constante.
6:15 p.m.
Es cierta esa frase de que a veces el enemigo está solo en tu cabeza. Conduzco hacia el sur de Lima y pienso en esa frase, se repite en mi cabeza mientras piso el acelerador con un apuro innecesario. A veces, cuando sufres de ansiedad buscas salidas con drogas legales e ilegales, terapias, etc., y ella odia que tome algunos caminos que se me cruzan, sin embargo, aquí estoy, sin ninguna otra necesidad más que la de estar en movimiento. Constante.
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